Migración Colombia repatrió a tres nicaragüenses víctimas de posible trata en San Andrés

Los rescatados fueron enviados de regreso a su país, tras una investigación por presunta explotación laboral en San Andrés.
Nicaragüenses repatriados desde San Andrés Crédito: Cortesía Migración Colombia

Migración Colombia llevó a cabo un retorno humanitario de tres ciudadanos nicaragüenses identificados como posibles víctimas de trata de personas con fines de explotación laboral en el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina. La acción se desarrolló tras un operativo de control y verificación realizado en coordinación con la Armada Nacional.

Las autoridades detectaron la situación cuando cuatro nicaragüenses fueron sorprendidos realizando actividades de pesca en aguas jurisdiccionales de Colombia, a bordo de una embarcación no autorizada.

Durante las verificaciones posteriores, se estableció que el capitán del barco habría estado involucrado en posibles prácticas de explotación laboral hacia los tres pescadores que lo acompañaban, lo que llevó a activar los protocolos de atención y protección establecidos para casos de trata de personas.

Migración Colombia, junto con la Armada Nacional y otras entidades del Estado, desplegó acciones para garantizar el bienestar de los extranjeros.

En el marco de la Red de Apoyo Migrante, se les proporcionó alojamiento temporal, alimentación, kits de aseo y acompañamiento permanente, priorizando la atención integral de las tres personas consideradas como posibles víctimas de explotación. Para facilitar su retorno, la autoridad migratoria coordinó con la Embajada de Nicaragua en Colombia la expedición de documentos de viaje, con el fin de permitir la salida voluntaria de los tres pescadores hacia su país de origen.

El proceso se realizó bajo la figura de retorno humanitario, mecanismo que busca salvaguardar los derechos de los migrantes en situaciones de vulnerabilidad.

El capitán de la embarcación permanece bajo investigación por su presunta participación en los hechos, mientras continúan las indagaciones para determinar la posible existencia de redes o intermediarios relacionados con la trata de personas en la zona insular.

Durante el proceso de acompañamiento, líderes locales como el pastor Alberto Gordon brindaron apoyo a las autoridades, facilitando la comunicación en mizquito, lengua nativa de los involucrados, y ofreciendo un espacio seguro durante su permanencia en el archipiélago.

La directora general de Migración Colombia, Gloria Arriero, destacó que la entidad continuará priorizando las acciones de protección frente a la vulneración de derechos humanos y los riesgos asociados a la migración irregular. Según expresó, la institución mantiene su compromiso con la lucha contra la trata de personas, la defensa de la dignidad humana y la promoción de procesos migratorios seguros y regulares.

Con este caso, Migración Colombia refuerza los mecanismos de respuesta humanitaria en territorios insulares, donde confluyen rutas marítimas y poblaciones migrantes en tránsito, y reitera la importancia de la cooperación interinstitucional para prevenir delitos asociados a la explotación y la vulnerabilidad de las personas migrantes.