Con cirios, flores blancas y banderas de la Policía que simbolizaban el respeto hacia la institución, se realizó la velatón en Bucaramanga en homenaje al intendente jefe de la Policía Nacional Fredy Leal Briceño, quien murió tras impedir un atraco en una joyería en el Centro Comercial Cuarta Etapa, en la capital de Santander.
Fue una noche de mucha tristeza para los asistentes, especialmente para amigos, familiares y compañeros que acompañaron a lo largo de su trayectoria al uniformado.
Diana Suárez, una compañera de trabajo, se encontraba notablemente afectada por la situación. Con voz entrecortada, recordó la entrega incondicional de su colega. “Era un jefe excelente, un buen padre y un amigo leal”, expresó, mientras las lágrimas surcaban su rostro. Suárez enfatizó que Leal siempre daba el 100 % por la institución, y su sacrificio el sábado lo convirtió en un héroe ante los ojos de todos.
En la entrada del Centro Comercial Cuarta Etapa, más de cien personas se congregaron para rendir homenaje al intendente Fredy Leal Briceño, quien perdió la vida en un acto heroico mientras cumplía con su deber.
La atmósfera estaba impregnada de tristeza; la mirada de cada uno de los asistentes lo decía todo: había fallecido un héroe de la patria, un hombre que lo entregó todo por la institución.
La comunidad no se quedó al margen de este emotivo tributo. Mujeres como Betty Pardo Flórez, secretaria de la Red de Mujeres de la Policía Metropolitana, lamentaron este hecho que hoy enluta a una familia.
“Este hecho es muy triste y lamentable, por eso rechazamos este vil asesinato de nuestro intendente jefe Fredy Leal. Nosotras, las mujeres de la Policía Metropolitana, nos solidarizamos con la señora esposa, con su hijo, con la familia, con los compañeros de trabajo y con toda la institución. Solo Dios y la Santísima Virgen les van a brindar la fortaleza y el consuelo necesario en estos momentos. Y hoy exigimos justicia, y que nuestra ciudad, nuestro territorio, nuestro país vuelva a la paz y a la tranquilidad que necesitamos”.
Las velas encendidas permanecieron durante horas, iluminando la noche como un faro de esperanza y memoria. En un momento de solemnidad, la comunidad guardó un minuto de silencio, un gesto que resonó con la gravedad del sacrificio de Leal. Este acto no solo fue un homenaje, sino un llamado a la reflexión sobre la violencia que cada día afecta a la sociedad.
En el sitio, las voces de los ciudadanos se alzaron, pidiendo un compromiso colectivo para enfrentar la delincuencia y proteger a quienes arriesgan sus vidas en el cumplimiento de su deber.
La muerte del intendente ha suscitado un clamor por la necesidad de medidas más efectivas que garanticen la seguridad de todos.
El homenaje a Leal fue más que un tributo; fue un momento de unidad y resistencia frente a la adversidad. La presencia de tantos ciudadanos en la velatón demostró que su legado perdurará en la memoria colectiva, recordando a todos que la lucha por un entorno más seguro es una responsabilidad compartida.
Así, Fredy Leal Briceño será recordado no solo como un policía, sino como un verdadero héroe que, con valentía y dedicación, dio su vida por la seguridad de su comunidad.