El Deportivo Pereira atraviesa uno de los momentos institucionales más delicados de su historia, luego de que el Ministerio del Deporte abriera un proceso formal para suspender su reconocimiento deportivo por incumplimientos laborales y tributarios.
La decisión, tomada tras verificar retrasos en pagos de salarios, prestaciones y aportes a seguridad social, dejó al club en una situación crítica que debe resolverse en un máximo de diez días hábiles. Según la Dirección de Inspección, Vigilancia y Control del Ministerio, las advertencias por incumplimiento ya habían sido comunicadas en varias ocasiones.
La medida no solo pone en riesgo la participación del equipo en la próxima temporada, sino que supone una alerta sobre la sostenibilidad administrativa del club. El caso ocurre mientras se adelanta un segundo proceso en el Ministerio del Trabajo, lo que implica dos frentes regulatorios simultáneos y aumenta la presión sobre los administradores del Pereira.
¿Qué implica la suspensión del reconocimiento deportivo?
La suspensión del reconocimiento deportivo emitida por el Ministerio del Deporte tiene efectos inmediatos. Aunque no es una sanción definitiva, sí restringe al 'conjunto matecaña' de llevar a cabo actividades propias de un club profesional mientras no demuestre estar al día con todas sus obligaciones laborales.
El organismo recordó que ningún equipo del fútbol colombiano puede superar retrasos superiores a 60 días en salarios o aportes sociales, y que el incumplimiento acumulado activa medidas administrativas como la actualmente aplicada.
Si el Pereira no acredita en el plazo establecido que ya realizó todos los pagos pendientes, la suspensión podría mantenerse y derivar en consecuencias mayores: multas que oscilan entre 1.000 y 5.000 salarios mínimos impuestas por el Ministerio del Trabajo, restricciones operativas e incluso la imposibilidad de participar en competencias organizadas por la Dimayor.
En un escenario extremo, la suspensión prolongada podría desembocar en la pérdida definitiva del reconocimiento deportivo, lo que dejaría al club por fuera del sistema del fútbol profesional colombiano, impediría la inscripción de jugadores y bloquearía la ejecución de funciones administrativas esenciales. En otras palabras, desaparecería.
¿El Deportivo Pereira puede descender por escritorio?
Una de las preguntas más repetidas entre los hinchas es si esta situación puede provocar que el equipo descienda por vía administrativa. La respuesta es sí. En caso de que el club no cumpla con los requisitos exigidos por el Ministerio del Deporte dentro del plazo, podría ser desafiliado de la Dimayor, lo que generaría un descenso por escritorio similar al que enfrentó el Cúcuta Deportivo en 2021.
Las fechas también juegan en contra. El próximo 11 de diciembre está programada la asamblea de la Dimayor, considerada la última oportunidad para que el Pereira llegue con su situación en regla. Si para entonces el club no ha recuperado su reconocimiento deportivo, no tendría autorización para competir en la Liga 2026.
El proceso llega en un momento de incertidumbre institucional, marcado por recientes cambios en la propiedad del equipo y tensiones administrativas. Mientras avanza el conteo regresivo, la institución deberá demostrar con soportes oficiales que cada obligación laboral está al día para evitar un desenlace que podría marcar un antes y un después en su historia.