La psicóloga Angie Moreno explicó en el programa Siempre contigo, en La FM, con Silvia Corzo, el trabajo con animales de compañía y su utilización como apoyo emocional en consultas y actividades organizadas por fundaciones. Señaló que un animal de apoyo emocional es un “animal de compañía” que forma parte de la familia y que, para certificarlo, se recomienda esperar a que tenga más de un año, cuando “ya uno identifica el tipo de carácter”.
Indicó además que existen distintos roles —perros de asistencia médica, perros guías y perros de terapia asistida— y que el perro de apoyo emocional no requiere el mismo entrenamiento que los anteriores.
¿Qué es un animal de apoyo emocional?
Moreno afirmó que la certificación debe incluir una valoración psicológica y la intervención de un etólogo o veterinario para garantizar el bienestar del animal. Advirtió que algunos profesionales “simplemente sin ningún tipo de formación... solo dicen: ‘Okay, yo te firmo un documento y ya está’”, mientras que su práctica incorpora cuestionarios sobre el vínculo humano–animal y criterios éticos para emitir certificados.
La psicóloga relacionó la interacción humano–animal con la liberación de oxitocina y describió ejercicios que recomienda en consulta, como sesiones de mindfulness con la mascota, en las que el paciente “se concentra en el pelaje, en la respiración mutua” para reducir estrés y generar una respuesta corporal de recuperación y calma.
Sobre el temperamento, señaló que la genética aporta una base, pero que la experiencia modifica la conducta. Mencionó la exposición temprana de cachorros a distintos estímulos para mejorar la tolerancia y el aprendizaje de comandos.
Añadió que normalmente la certificación se realiza después del año de edad y que, aunque algunas razas tienen ciertos rasgos, “más que la raza, es la crianza y la educación” lo que determina si un animal puede cumplir funciones de apoyo emocional.
¿Cómo se certifica un animal de apoyo emocional?
Moreno subrayó la importancia del bienestar animal y explicó que trabaja con veterinarios y etólogos para contrastar valoraciones. Al mencionar el caso de su perra Mara, señaló que algunos animales requieren entrenamiento adicional antes de certificarlos.
Respecto a la normativa, aclaró que los perros de asistencia sí tienen respaldo legal y no pueden ser rechazados en espacios públicos, mientras que los animales de apoyo emocional no están regulados, por lo que establecimientos y aerolíneas pueden establecer sus propias condiciones. La entrevistada reiteró la relevancia de la ética profesional en la emisión de estos documentos.
Finalmente, mencionó una actividad organizada por las fundaciones participantes e invitó a una sesión de mindfulness difundida en las redes de la fundación Amarse.
También indicó que, en su experiencia clínica, ha observado efectos positivos en la reducción del estrés en quienes practican estas técnicas con sus animales de compañía y añadió: “esta no está relacionada con animales”.
*Este contenido fue escrito y producido por una inteligencia artificial bajo supervisión y curaduría de un periodista de La FM