Lo que debía ser una fiesta del fútbol terminó convertido en un episodio que hoy tiene a Medellín en el centro de la polémica. Videos entregados por la Policía y analizados por las autoridades muestran cómo toneladas de pólvora lograron ingresar al estadio Atanasio Girardot durante la final de la Copa BetPlay. Las imágenes son contundentes: hubo complicidad y también violencia.
Dos escenarios que preocupan: colaboración y amenazas
Las grabaciones evidencian dos realidades paralelas. Por un lado, escenas de aparente complicidad donde algunos encargados de la logística permitieron el ingreso de vehículos cargados con pólvora sin mayores controles.
Por otro, momentos de tensión extrema: personal logístico, varias de ellas mujeres, intentando frenar el paso de cajas repletas de material pirotécnico, mientras eran empujadas y amenazadas por hinchas de ambos equipos.
El miedo quedó registrado en testimonios: “Nos dijeron que nos iban a agredir si no dejábamos pasar las cajas”, relató una trabajadora. Esta situación refleja la vulnerabilidad del personal frente a la violencia organizada y la falta de garantías para cumplir con su labor.
Un operativo que no fue suficiente
A pesar de un dispositivo con más de 1.100 policías y 500 auxiliares, la presión violenta y las irregularidades internas lograron vulnerar los filtros.
El resultado fue evidente: toneladas de pólvora dentro del estadio, un retraso de 14 minutos en el inicio del partido y periodistas evacuados por afectaciones respiratorias. Las imágenes también muestran cómo la seguridad fue desbordada por la magnitud del desorden.
La respuesta institucional: denuncias, carteles y sanciones
El secretario de Seguridad, Manuel Villa Mejía, anunció denuncias ante la Fiscalía y advirtió que las investigaciones apuntan a sanciones penales y administrativas para quienes facilitaron el ingreso.
Como parte de la ofensiva institucional, la Alcaldía de Medellín reveló tres carteles con las imágenes de más de 40 personas que participaron en los desmanes, con el objetivo de judicializarlas.
Además, se confirmó que la próxima semana, durante la realización de un nuevo Comité de Convivencia del Fútbol, se revelará la cuantía de los daños ocasionados en el estadio y las sanciones administrativas que enfrentarán los equipos antioqueños.