Las 'manos salvadoras' del enfermero de guerra que no deja morir a los militares heridos en combate

El subteniente José Sebastián Aguirre tiene una misión clara dentro de Ejército: salvar la vida de los militares heridos en combate.
Subteniente José Sebastián Aguirre Crédito: Valesca Alvarado Ríos / LA FM

El subteniente José Sebastián Aguirre está siempre listo para jugársela toda por sus compañeros, sabe que en medio de la guerra, la muerte siempre está rondando.

Aguirre es uno de los hombres más importantes dentro de la tropa, su función no es otra que la de salvar la vida de los militares heridos en combate, una batalla contra el tiempo y la muerte.

Tiene 28 años, nació en Bogotá y hace parte del Batallón de Infantería Mecanizada N. 19 del Ejército Nacional. Actualmente, este militar está asignado a una unidad en Fortul, Arauca.

Su guerra no se enfrenta con fusiles y municiones, sino con gasas, bisturí y nervios de acero para mantener la calma en medio del caos que trae consigo un combate donde sus compañeros se debaten entre la victoria y la posibilidad de caer en el campo.

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Una historia de amor al Ejército

Este oficial ha estado en diferentes unidades en Antioquia, Santander y Arauca, e independientemente de la zona, su compromiso es el mismo: salvar hasta el último militar herido en combate.

"Me ha gustado mi carrera militar y mi actividad como médico en el Ejército. Estoy acá porque amo lo que hago, me gusta atender a mis soldados, atender a todo el personal. Es un trabajo totalmente diferente atender a un civil que a un militar", dijo.

A veces, sus jornadas son extensas y llenas de incertidumbre, pero con amor, dice, las disfruta cada segundo.

"Es un trabajo arduo, porque realmente es mucho el personal que se debe de atender cuando uno trabaja en en los diferentes dispensarios médicos del país. Pero ha sido un trabajo bonito, lleno de orgullo de estar atendiendo a mi tropa, que es lo que más me gusta", agregó.

Su trabajo no es fácil. Frente a él llegan compañeros de curso y amigos que no logran salir ilesos de la guerra. Salvarlos depende de sus habilidades y conocimiento, pero también de la serenidad con la que afronte el caos.

"Es un momento duro, en donde siempre hay muchas víctimas, hay mucha confusión, siempre hay que tomar las cosas con mucha calma, pues en este trabajo, ya que hay mucho estrés en la atención, todos me buscan para que les salve la vida. Es un trabajo complicado, especialmente donde hay una amenaza latente cerca de las instalaciones o el cantón", relata el subteniente.

Aguirre está listo para atender a los militares heridos en combate, ya sea por impactos de arma, explosivos o incluso por emboscadas de francotiradores.

El ataque a la base de Puerto Jordán

El departamento de Arauca, donde actualmente está asignado el subteniente, es uno de los más peligrosos para los militares. La situación de orden público es compleja y el actuar de los grupos criminales no da tregua.

Así quedó evidenciado el pasado 5 de octubre, cuando, por tercera vez, la base militar de Puerto Jordán fue foco de un atentado terrorista con explosivos. Un ataque que puso en alerta a Aguirre, pues varios de sus compañeros resultaron heridos.

"Recuerdo el ingreso de múltiples víctimas, todo el mundo estaba confundido en ese momento, no sabían qué hacer. Entonces, ahí es donde uno debe tener el liderazgo suficiente como para dirigir, primero, a mi personal de sanidad y, segundo, a mí mismo, para orientar y recomendar las acciones que se hacen durante la atención", recordó el militar.

Pero el subteniente Aguirre no solo les salva la vida a los militares, también salva la de los guerrilleros que resultan heridos, pues al otro lado, también hay una familia que, probablemente, los espera.

"Es una profesión complicada porque uno tiene en sus manos la vida de de otra persona. Es una responsabilidad grande, una carga grande que uno tiene al asumir el mando como médico y como director del establecimiento de la unidad de salud operacional", revela.

Para el subteniente José Sebastián Aguirre cada vida que salva es una batalla que le gana a la muerte, un trabajo que lo llena de orgullo y satisfacción.

"Es gratificante devolverle a un papá, a una mamá, a un hermano, a una esposa, su militar, su persona. Es importante para ellos, y buscamos devolvérselos con bien, ya que para ellos va a ser importante y va a ser gratificante que sus seres pues lleguen otra vez a a casa", concluyó.

Un militar destacado

Su compromiso, entrega y lealtad es reconocido por sus compañeros y por la institución.

Es por ello que el subteniente Aguirre será galardonado como uno de los mejores hombres del Ejército Nacional, en medio de la décima tercera Noche de Honor, en la categoría de 'Héroe de Sanidad Militar', que se llevará a cabo este viernes.

Aguirre espera que su trabajo sea ejemplo e inspiración para sus compañeros, y que se sumen para seguir salvando cientos de vidas de militares que arriesgan las suyas por la seguridad de Colombia.