La Alianza Verde está atravesando por semanas tensas en medio de la preparación para las elecciones de 2026. Además de no lograr ponerse de acuerdo en un candidato presidencial propio, dentro del partido crecen las diferencias ideológicas y estratégicas que han traído discusiones sobre una posible división interna.
¿Por qué no hay un candidato presidencial que una al partido?
Uno de los puntos que más presión ha generado es la falta de un candidato presidencial para participar en la consulta del frente amplio. El partido se ha reunido en varias ocasiones buscando un represente, pero no lo han logrado. Incluso le propusieron la candidatura al congresista Ariel Ávila, quien nuevamente dijo que no está interesado.
La ausencia de un nombre que los agrupe ha dejado al partido navegando en varias direcciones: un sector se inclina por Claudia López, otro por Sergio Fajardo, y otro está más cerca de la línea de JP Hernández, quien representa posiciones más hacia la derecha. También hay miembros que insisten en apoyar la candidatura de Iván Cepeda, bajo la idea de que, aunque no ven grandes posibilidades de triunfo, sería una salida “digna” para el partido. De manera más tímida ha surgido el nombre de Maurice Armitage, pero su eventual candidatura no ha despegado.
¿Qué está impulsando la división interna dentro de los verdes?
En conjunto al debate electoral, un grupo de congresistas han expresado la necesidad de una escisión formal del partido. Argumentan que la Alianza Verde ha perdido independencia, especialmente por el acercamiento de algunos sectores al Gobierno nacional. Piden reconstruir un espacio más coherente ideológicamente y con líneas claras frente al 2026.
Pero no todo el partido está de acuerdo. Otro bloque, compuesto por directivos y dirigentes territoriales, se opone a la división y considera que romper la colectividad ahora solo debilitaría su presencia institucional y su capacidad de competir en las próximas elecciones. Por eso, la discusión sobre la escisión se aplazó, mientras buscan una salida que no destruya al partido justo antes del ciclo electoral.
¿Qué significa este momento para las elecciones de 2026?
La falta de candidato, sumada a las diferencias internas, deja a la Alianza Verde en una encrucijada. Si no logran cerrar filas pronto o definir una estrategia común, el riesgo es perder peso dentro del frente amplio o fragmentarse aún más. Por ahora, los verdes siguen tratando de encontrar un rumbo que les permita llegar con cohesión a 2026.