¿Cómo preparar un ajiaco santafereño perfecto para la cena de Navidad?

Una guía clara para lograr una sopa tradicional con textura, aroma y sabor equilibrado.
El ajiaco es una preparación tradicional ideal para compartir en cenas navideñas. Crédito: Freepik

El ajiaco santafereño es mucho más que una sopa; es un plato que reúne tradición, memoria y sabor en la mesa colombiana. En diciembre, cuando la Navidad invita a compartir y a rescatar recetas familiares, este clásico bogotano se convierte en una opción cálida, reconfortante y perfecta para unir a la familia alrededor de una preparación casera. Su historia, profundamente ligada a la gastronomía colombiana, lo ha consolidado como parte esencial de la identidad del país.

Aunque con los años el ajiaco tradicional ha evolucionado, conserva elementos que conectan a las familias con tiempos antiguos. La receta actual tiene raíces que se remontan a comunidades indígenas de la región andina, que elaboraban sopas de papas, maíz y hierbas locales. Con la llegada de nuevos ingredientes y costumbres, el ajiaco santafereño tomó forma hasta convertirse en la preparación que hoy se disfruta durante celebraciones especiales, sobre todo cuando se busca un plato cálido para la cena navideña.

Ingredientes esenciales del ajiaco santafereño

Para preparar un ajiaco casero, se necesitan ingredientes sencillos pero clave para lograr la textura espesa y el sabor equilibrado que caracterizan esta sopa. Entre ellos están el pollo, las tres variedades de papa (criolla, sabanera y pastusa), la mazorca, las guasas o guascas frescas, y acompañantes como crema de leche, arroz blanco y alcaparras. Cada elemento aporta un matiz distinto al ajiaco y permite construir una preparación con aromas profundos y consistencia perfecta para compartir en Navidad.

La receta del ajiaco santafereño destaca por su mezcla de tres papas y un caldo aromático.Crédito: Colprensa


Las papas son el corazón del ajiaco. La pastusa aporta espesor, la sabanera mantiene la forma y la criolla ofrece color y suavidad. Las guascas, por su parte, dan esa nota herbal inconfundible que distingue al ajiaco santafereño. En conjunto, estos ingredientes crean un plato lleno de tradición que resulta ideal para cualquier cena navideña.

Cómo preparar el ajiaco paso a paso

Para iniciar la preparación del ajiaco santafereño, se cocina el pollo en agua junto con la mazorca hasta obtener un caldo aromático y consistente. Una vez listo el caldo, se retira el pollo y se incorporan las papas, permitiendo que cada variedad libere sus características y otorgue textura al plato. Este proceso debe hacerse a fuego medio para que la sopa tome cuerpo de manera natural.

Posteriormente, se agregan las guascas, que deben cocinarse el tiempo suficiente para perfumar la receta sin perder su frescura. Cuando el pollo esté desmenuzado, se devuelve a la olla para integrarse con las papas y el caldo. La cocción lenta ayuda a que el ajiaco adquiera ese sabor profundo que lo hace tan especial en celebraciones navideñas.

El ajiaco reúne papas, pollo y guascas para crear una sopa espesa típica colombiana.Crédito: Freepik


Toques finales y acompañamientos navideños

Al servir el ajiaco santafereño, es importante acompañarlo con crema de leche, arroz blanco y alcaparras, que elevan la experiencia y añaden contraste. Algunas familias incluyen aguacate maduro o un toque de cilantro fresco, según sus tradiciones. Lo esencial es mantener el equilibrio del plato y respetar la suavidad y el aroma que lo han convertido en un ícono culinario de Colombia.

Para la cena de Navidad, el ajiaco representa una opción cálida, completa y llena de historia. Su preparación no requiere técnicas complejas y permite disfrutar un plato tradicional que reúne a todos en la mesa. En épocas de celebración, el ajiaco se convierte en la excusa perfecta para mantener vivas las recetas que han pasado de generación en generación.