¿Atún en agua o aceite? Nutricionistas revelan cuál aporta más beneficios a la salud

El contenido de grasas, calorías y omega-3 varía entre el atún en agua y el atún en aceite; expertos explican qué tener en cuenta.
El atún en lata varía en calorías y grasas según se conserve en agua o en aceite. Crédito: Freepik

El atún en lata es una comida muy popular en el mundo, utilizado en preparaciones rápidas y de consumo cotidiano. Forma parte de las despensas de los hogares, debido a su disponibilidad, su conservación prolongada y su uso frecuente en recetas como ensaladas, pastas frías, emparedados y preparaciones para consumo inmediato.

Generalmente, es distribuido en supermercados y mercados locales, lo que facilita su acceso en zonas diversas. Su presentación permite que sea transportado, almacenado y empleado sin necesidad de refrigeración, por lo que aparece en contextos domésticos, laborales y escolares.

Valor nutricional del atún en lata

Las presentaciones de atún en agua y en aceite muestran diferencias en su perfil nutricional.Crédito: Freepik

El atún en lata aporta una cantidad relevante de proteínas, entre 20 y 30 gramos por cada 100 gramos, dependiendo de la subespecie, asegura la Academia Española de Nutrición y Dietética. Este contenido lo convierte en una fuente accesible para quienes necesitan incorporar proteína de origen marino en su alimentación habitual.

El aporte calórico cambia según su medio de conservación. La academia explica que el atún en agua contiene alrededor de 100 kilocalorías por cada 100 gramos, mientras que la versión en aceite escurrido puede alcanzar aproximadamente 200 kilocalorías por cada 100 gramos. Esta diferencia se debe al contenido de grasa que se incorpora durante el proceso de enlatado.

La institución también señala que el porcentaje de grasa puede variar entre 2 % en presentaciones al agua y hasta 12 % en presentaciones en aceite. Aunque estas variaciones dependen de la subespecie, el medio de conservación es un factor determinante para el contenido final de lípidos.

El atún en lata puede incorporarse a planes de alimentación destinados a control de peso, siempre que se considere el gasto energético total y la presentación elegida, agrega la entidad. La densidad nutricional del pescado se mantiene estable gracias al proceso de conserva, lo que permite su inclusión en distintas estrategias dietéticas.

Atún en agua o en aceite: lo que dicen las instituciones médicas

El contenido de omega-3 puede cambiar según el tipo de conserva y si se drena el aceite.Crédito: Freepik

La elección entre atún en agua y atún en aceite depende de factores nutricionales que han sido analizados por instituciones como Mayo Clinic, Mayo Clinic Health System y Cleveland Clinic. Cada organismo aporta elementos para entender cómo influyen el contenido de grasa, el tipo de aceite y la conservación de nutrientes como los omega-3.

La Mayo Clinic explica que las grasas insaturadas cumplen un papel clave en la alimentación. Estas incluyen las grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, consideradas preferibles frente a las grasas saturadas. Los aceites vegetales usados para conservar el atún suelen pertenecer a estas categorías, lo que modifica el perfil nutricional cuando se opta por atún en aceite.

De acuerdo con la institución, el consumo de grasas insaturadas puede influir en procesos metabólicos relacionados con la salud cardiovascular. Cuando el atún se conserva en aceite de origen vegetal, se incorpora una cantidad adicional de estas grasas, lo que incrementa el aporte energético, pero también modifica la calidad de los lípidos presentes en la porción consumida.

Tipos de aceite en las conservas

La Mayo Clinic Health System describe diferencias entre aceites vegetales utilizados comúnmente para conservar alimentos como el atún. El aceite de oliva contiene principalmente grasas monoinsaturadas, mientras que aceites como el de girasol aportan grasas poliinsaturadas. Ambos tipos participan en funciones relacionadas con el metabolismo lipídico y son considerados fuentes útiles dentro de un patrón de alimentación ordenado.

Según explican, los omega-3, presentes de manera natural en pescados como el atún, son grasas poliinsaturadas asociadas a funciones celulares y procesos metabólicos. Su presencia en la dieta proviene principalmente de especies marinas, y su aporte puede variar según el método de preparación o conservación del alimento.

Omega-3 en el atún en lata y cómo afecta drenarlo

Los aceites vegetales usados en el atún en lata influyen en su aporte de grasas insaturadas.Crédito: Freepik

La Cleveland Clinic incluye al atún dentro de los pescados con contenido significativo de omega-3, específicamente EPA y DHA. La institución señala que, en algunos casos, parte de estos ácidos grasos puede adherirse al aceite dentro de la lata. Cuando el aceite es drenado antes del consumo, una fracción de los omega-3 presentes en la conserva puede disminuir.

La clínica indica que el tipo de aceite también influye en el perfil nutricional final. Cuando se emplea aceite vegetal, el contenido de grasas totales aumenta, pero se incorporan grasas insaturadas de origen vegetal. Esto genera diferencias entre consumir el producto con el aceite incluido o retirarlo durante la preparación.

Consideraciones prácticas según los objetivos alimentarios

Las instituciones consultadas coinciden en que la elección entre atún en agua o en aceite depende del objetivo nutricional y del contexto de consumo.

Quienes buscan una fuente de proteína con menor aporte calórico suelen optar por presentaciones en agua, mientras que quienes desean integrar grasas insaturadas pueden inclinarse por versiones en aceite, especialmente si el aceite es de origen vegetal y se consume en la preparación final.