Un plato caliente para cerrar el año: así viven el 31 de diciembre adultos mayores y población vulnerable en Bogotá

Un espacios que buscan dar un apoyo para quienes viven un fin de año distinto.
Población que recibe apoyo en comedores Crédito: La FM - David Rincón

Para muchas personas en Bogotá, el 31 de diciembre no se vive entre celebraciones ni mesas familiares, sino enfrentando dificultades para acceder a una alimentación básica; en medio de esa realidad, espacios como comedores comunitarios como el de Las Ferias, en la localidad de Engativá, se convierten en un apoyo.

Allí se brinda comida caliente y acompañamiento para adultos mayores y personas con discapacidad, como parte de la red de 136 comedores de la Secretaría Distrital de Integración Social que, incluso en fechas especiales, ofrece menús distintos para cerrar el año.



Don Adolfo, de 83 años, es uno de los beneficiarios de este lugar. Su historia refleja las dificultades que enfrentan muchos adultos mayores en la ciudad, antes de este espacio, alimentarse era una tarea compleja.

“Antes de venir al comedor, fue bastante difícil, porque, sin recursos, ya estaba sufriendo mi discapacidad, y algunos días tenía que reciclar, por ahí, lo que encontraba, para comer algo, un bocado de comida en el día. Conocidos y vecinos que tenían sus venticas en la calle, de buñuelos, de tinto, café así, galletas”, recuerda.



Apoyo diario para ciudadanos

Como él, otras personas llegan diariamente al comedor Las Ferias, donde la Secretaría Distrital de Integración Social ofrece atención a población vulnerable. Ingrid Lozada, encargada del lugar, explica que este tipo de comedores funcionan de lunes a sábado y hacen parte de una red de 136 espacios distribuidos en distintas localidades de Bogotá.

“Manejamos todo tipo de población, desde los cinco añitos hasta los cien, ciento dos añitos es la población más adulta que tenemos en cada comedor. Prestamos servicio a población vulnerable de estrato o de sisbén, tanto pobreza, pobreza extrema, y población vulnerable. Aquí en El Comedor manejamos trescientas personas, que son de la zona, de la parte de la localidad Engativa”, djio.


Menú para el 31 de diciembre

Para este 31 de diciembre, el menú fue especial: crema de tomate, pechuga de pollo rellena con queso y jamón, acompañada de una ensalada con espinaca, frutas, uvas pasas, miel y crema de leche.

Alirio, un adulto mayor con discapacidad visual, afirma que su llegada al comedor cambió su rutina. Antes, su dieta se reducía a pan y agua. Hoy recibe una comida completa.

“Tuve dificultades antes de llegar aquí al comedor, me tocaba, digamos, tomar un vaso de agua, un pan, el desayuno, a las nueve de la cena era otro vasito de agua y un panecito”, dijo.


Espacios para la alimentación

Para él y para María, otra usuaria del servicio, estos espacios no solo garantizan alimentación, sino también la posibilidad de socializar y sentirse acompañados.

“Sobre todo, socializarnos un poco con las personas que vienen, pues, porque nosotros casi no nos acercábamos a, porque no salíamos, no nos acercábamos casi a nadie”, dijo.

Así, mientras la ciudad despide el 2025 y se prepara para recibir el 2026, espacios como estos buscan dar un apoyo para quienes viven un fin de año distinto.