El corre corre del día a día muchas veces se convierte en un estrés que puede terminar en no dormir bien. De lunes a viernes, muchas personas no descansan ni duermen bien y buscan recuperar y reparar ese sueño el fin de semana, pero ¿Qué dicen los expertos sobre esta táctica?
¿Realmente funciona dormir más los fines de semana?
Lo que mucha gente no sabe es sí esto es efectivo o no. Es por eso, que aquí le contamos la opinión de los expertos en salud sobre este tema.
La idea de “compensar” el sueño perdido no es nueva. De hecho, para muchos, dormir más sábado y domingo se ha convertido en una estrategia para “sobrevivir” ante largas jornadas laborales, estrés académico o diferentes responsabilidades de la vida diaria. Sin embargo, aunque esta práctica parece lógica, la ciencia ha trabajado durante años para responder si realmente brinda beneficios o si, por el contrario, podría convertirse en un problema para la salud.
Algunas investigaciones, tales como la de Reino Unido, que fue presentado por el Congreso de la Sociedad Europea de Cardiología, encontró que las personas que intentan recuperar el sueño el fin de semana pueden tener menos probabilidad de sufrir de enfermedades cardiovasculares, reduciendo el riesgo en un 20%, frente a las que duermen poco todos los días.
Los investigadores señalan que el descanso adicional podría aliviar la presión arterial, disminuir niveles de estrés y mejorar temporalmente la función del sistema inmunológico, lo que explicaría por qué se observa una ligera protección cardíaca. Esto ha llevado a algunos especialistas a considerar que, en casos de déficit de sueño moderado, dormir más los fines de semana puede ser un respiro para el cuerpo.
¿Pero qué dicen los estudios que alertan riesgos?
Pero, aunque tiene beneficios, también, los expertos advierten consecuencias. Un estudio de la Universidad de Boulder Colorado (EE. UU.), dio como resultado que alternar los ciclos de sueño como recuperación es perjudicial para la salud metabólica.
Este hallazgo cobró aún más importancia porque muchas personas mantienen un patrón de sueño irregular entre semana, duermen poco y luego lo compensan durmiendo más durante el fin de semana, creando ciclos que se repiten cada siete días. Este proceso, según especialistas en sueño, puede compararse con experimentar un “jet lag social”, ya que el cuerpo se ve obligado a reajustar constantemente su reloj interno.
Hacer este tipo de práctica, según el estudio publicado por la revista Current Biology, concluyó que estos patrones aumentan el riesgo de sufrir de diabetes y obesidad. Pues esto desajusta el reloj circadiano, por lo que afecta la regulación de los niveles de azúcar en sangre.
En otras palabras, aunque dormir más puede sentirse reparador, la evidencia indica que los cambios bruscos de horarios no permiten que el cuerpo mantenga un equilibrio hormonal adecuado, especialmente en relación con la insulina, el metabolismo y el apetito.
¿Qué recomiendan los expertos?
El sueño reparador el fin de semana, puede ser un alivio de todo el trajín de la semana, pero es un riesgo para la salud metabólica. Por lo mismo, lo expertos concluyen que lo mejor sería tener un ciclo regular de sueño como dormir seis o siete horas diarias.
Además, especialistas en higiene del sueño insisten en que la clave no está en dormir más algunos días, sino en dormir lo suficiente todos los días. Mantener horarios constantes, evitar pantallas antes de dormir, moderar el consumo de cafeína y crear rutinas relajantes son estrategias que suelen mejorar la calidad del descanso sin necesidad de “parches” de fin de semana.