La Asociación Unitaria de Trabajadores de Emssanar (ASUNTSSANAR) ratificó su preocupación por el no pago de la prima de servicios, a la que se sumaría este 30 de diciembre el salario correspondiente al último mes del año.
Una situación que afecta a más de 1.670 trabajadores de la EPS en los departamentos de Valle del Cauca, Putumayo, Cauca y Nariño.
De acuerdo con la organización sindical, el retraso en el cumplimiento de estas obligaciones laborales ha generado un grave impacto económico y social en las familias de los empleados, especialmente por la carga financiera que representa el cierre de año, época en la que se incrementan los gastos básicos y los compromisos económicos.
Según información conocida por La FM, la demora estaría relacionada con embargos judiciales a las cuentas de Emssanar, ordenados por un juez del municipio de Concordia, que habría decretado el embargo de recursos del sistema de salud desde meses atrás, sin que hasta ahora se haya dado una solución definitiva a esta problemática.
La EPS Emssanar se encuentra actualmente bajo una medida especial de vigilancia de la Superintendencia Nacional de Salud y, desde el pasado 14 de noviembre, cuando asumió funciones la nueva agente interventora, se han adelantado gestiones para superar las dificultades financieras y administrativas que enfrenta la entidad.
Fuentes consultadas indicaron que recientemente se logró una modulación de la sanción del embargo, la cual ya fue notificada a la Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud (Adres) para su estudio y evaluación.
Con este trámite, se espera que a comienzos de enero de 2026 se autorice la liberación de los recursos, permitiendo así el giro de los pagos pendientes a los trabajadores.
Por su parte, el director de la Adres, Félix León Martínez, explicó a La FM que todas las EPS, excepto Emssanar, postularon oportunamente para el pago del Régimen Subsidiado en la última semana de noviembre, giro que se realizó el 5 de diciembre.
“La postulación de Emssanar no llegó sino hasta el 22 de diciembre, aprobada por la Superintendencia; es decir, casi un mes después. No obstante, la Adres hizo un esfuerzo y logró girar los recursos el 24 de diciembre, antes del cierre bancario”, afirmó.
Martínez precisó que, debido a la medida de vigilancia especial, los pagos de Emssanar deben contar con la aprobación de una firma contralora y de la Superintendencia Nacional de Salud antes de llegar a la Adres. “Parece ser que la mayor demora se presentó en la aprobación por parte de la firma contralora”, agregó.
En su pronunciamiento, ASUNTSSANAR reiteró que, aunque reconoce que el incumplimiento estaría asociado a los embargos judiciales, esta situación no exonera a la administración de sus responsabilidades legales frente a los trabajadores.
“El no pago oportuno de salarios y prestaciones no elimina la obligación laboral. Por el contrario, exige medidas diligentes y prioritarias para garantizar el cumplimiento de los derechos de los trabajadores”, señaló el sindicato, que advirtió que continuará en alerta frente a la evolución de esta situación.