El Parque Natural Chicaque, ubicado entre San Antonio del Tequendama y Soacha, se ha convertido en uno de los destinos favoritos para quienes buscan desconectarse sin alejarse demasiado de Bogotá. Apenas los visitantes llegan, pueden notar el cambio de ambiente: se siente aire frío, olor a bosque y un paisaje que baja de los 17°C a los 12,5°C dependiendo de la zona de la montaña.
Naturaleza para explorar sin salir de Cundinamarca
Quienes caminan por Chicaque pueden sentir el cambio del ruido de la ciudad a la tranquilidad de la naturaleza. La reserva cuenta con siete tipos de bosque, desde el Bosque de Robles, único en Latinoamérica, hasta el Bosque de Niebla, que casi siempre está cubierto por una capa suave de humedad.
También están el Bosque de Montaña, el Bosque de Orquídeas sobre el sendero del Roquedal y el Bosque de Palmeras en el camino de Las Dos Quebradas. A esto se suman el Bosque Ripario, que recorre ríos y quebradas, y el Bosque Andino. Con más de 20 kilómetros de senderos, el parque tiene cascadas de hasta 70 metros, zonas tranquilas para descansar y espacios de fauna y flora.
Llegar a Chicaque es sencillo. Quienes van en vehículo particular pueden tomar la autopista Sur, pasar por Soacha y después llegar al desvío para la Vereda Cascajal. Luego se avanza por una vía destapada hasta la entrada principal, donde el parqueadero no tiene costo. Los fines de semana también funciona el Expreso Chicaque, que recoge a los viajeros en la estación Terreros de TransMilenio.
Actividades para disfrutar el bosque a cualquier ritmo
El parque tiene diferentes experiencias para los visitantes. Los más aventureros encuentran actividades como Arborismo, que consiste en subir un ficus de 32 metros y descender en rapel, o la tirolesa de 340 metros, que cruza el bosque a gran altura. También están el Barcoloco, los recorridos a caballo y el Árbol de los Sueños, donde se pueden hacer fogatas.
Las caminatas nocturnas en el bosque de robles están disponibles los fines de semana y se han vuelto uno de los planes más visitados. Para quienes disfrutan de la fauna, la reserva cuenta con más de 400 especies de aves, que pueden observarse en las caminatas.
Opciones para quedarse y vivir la experiencia completa
Chicaque tiene varias alternativas de alojamiento. El Hostal Refugio de Montaña cuenta con habitaciones familiares y áreas comunes para descansar. En la zona de camping se pueden instalar carpas en áreas autorizadas y, en algunos casos, utilizar las duchas y servicios del Refugio.
Una de las experiencias más llamativas son los Nidos, pequeñas casas en los árboles. Uno de los más reconocidos es el Nido Tangara, construido sobre un nogal a ocho metros de altura. Tiene terraza, baño seco y una vista privilegiada. Sus precios están entre $283.000 y $543.000 por noche.