María Corina Machado fue galardonada con el premio Nobel de Paz 2025. La lideresa de la oposición venezolana no pudo estar presente en la ceremonia de entrega del galardón, puesto que la salida de su país fue complicada y llena de retos en los que se expuso a la captura del régimen que tiene guardias en diferentes partes de Venezuela.
A horas de que se llevara a cabo la ceremonia, la Academia confirmó que Corina Machado no asistiría a Oslo, porque se encontraba retrasada. Fue su hija, Ana Sosa, quien agradeció a la corona nórdica por la elección y ofreció un discurso de alrededor de 25 minutos en los que habló de la historia de su país y cómo la dictadura había corrompido a la sociedad venezolana. Afirmó que el miedo debía ser combatido con amor. Asimismo, fue Ana la persona que recibió el premio por su madre.
Horas más tarde, María Corina Machado recibió su galardón. Sin embargo, no ha sido la única premio nobel que no pudo asistir a la entrega de la medalla con la silueta de Alfred Nobel, puesto que, a lo largo de las ceremonias de este premio, se han registrado diferentes casos en los que los seleccionados por la Academia no llegan al lugar de encuentro.
Premios Nobel que no han recibido el galardón en la ceremonia
En 1960, Albert Luthuli fue nombrado como Premio Nobel de la Paz. Por entonces, era líder del Congreso Nacional Africano (ANC) en Sudáfrica. En este país se vivía el apartheid (sistema de segregación racial institucionalizada en el sur de África entre 1948 y la década de 1990). Fue por esta razón, por la que Luthuli no pudo estar en la capital Noruega, dado que tenía prohibido viajar.
Aunque recibió el premio, su discurso fue entregado y leído posteriormente cuando se le permitió viajar al año siguiente bajo fuertes restricciones. Fue seleccionado por luchar contra el apartheid.
El nobel de paz no ha sido el único que no ha podido ser entregado de manera directa al ganador. Seis años antes, Ernest Hemingway fue el ausente. El escritor y periodista estadounidense tuvo que abstenerse de ir a Oslo, porque en 1954 sufrió un par de accidentes en avión que le dejaron secuelas en su cuerpo. Aunque Hemingway fue un viajero acérrimo, no pudo dar su discurso. Lo hizo, en cambio, el entonces embajador de EE.UU., mismo que posteriormente le entregaría la medalla en Cuba. Esta alegría le llegó luego de ser premio Pulitzer, en 1953, por el libro 'El viejo y el mar'.
El caso de Aleksandr Solzhenitsyn, que fue nombrado Nobel de literatura en 1970, es especial. El escritor ruso, que denunció la existencia de los Gulags (campos de concentración rusos) en medio de la dictadura comunista posterior a la segunda guerra mundial, no podía salir de su país, por temor a ser expulsado definitivamente. Su situación, no la única, llevó a la academia a decidir llevar a cabo la ceremonia general sin su presencia. Cuatro años más tarde, sus miedos se cumplieron y fue expulsado de su país. El 10 de diciembre de 1974, Aleksandr fue galardonado.
Otros Nobel de paz que no pudieron hacer presencia en la ceremonia
Lech Walesa, premio Nobel de la Paz 1983, fue seleccionado como tal, luego de que luchara por la igualdad como líder sindical en Polonia. En aquellos años, el país se encontraba najo una ley marcial que endurecía las represiones en contra de ciudadanos que reclamaran sus derechos.
Las autoridades ya habían detenido a Lech en diversas ocasiones y optó por no asistir a Noruega, por miedo a que le cancelaran su ciudadanía. Optó, entonces, por enviar a su esposa Danuta Walesa, que recibió el premio.
Casi diez años antes, el físico nuclear y activista, Andréi Sájarov, fue elegido como nobel de paz en 1975 por combatir la represión comunista en Rusia. El gobierno soviético tenía fuertes restricciones en su contra y se encontraba bajo arresto domiciliario y vigilancia constante.
También fue su esposa, quien representó al galardonado en esta ceremonia. Yelena Bonner pronunció su discurso. Andréi ganó gran reconocimiento por luchar por los derechos de los ciudadanos rusos en medio del régimen Leninista.